Elecciones presidenciales pondrán a prueba al fundación de Brasil

Camila Reinoso and Nina Fernandez

Las próximas elecciones generales de Brasil están programadas para octubre de 2022. Aunque esa fecha todavía parece lejana, la carrera entre los candidatos presidenciales ya ha empezado. A pesar de la larga lista de candidatos, la carrera se enfoca en solamente dos, el presidente actual, Jair Bolsonaro, y Luiz Inacio Lula da Silva.

 La competencia intensa entre los dos candidatos ha causado un aumento de candidatos del partido bisagra, pero no tienen suficiente soporte individual como para ser una amenaza a Bolsonaro o a Lula. 

Jair Bolsonaro es un político y oficial militar retirado quien ha sido presidente de Brasil desde enero de 2019. Sus ideas se centran en la riqueza, y la religión. En un discurso de 2017, Bolsonaro expresó, “Dios sobre todo. No existe tal cosa como un estado secular.” Bolsonaro también ha expresado sus ideas controversiales sobre las mujeres, y sus palabras han causado condena por todo Brasil. Luiz Inácio Lula da Silva es un político y fue presidente de Brasil desde 2003 hasta 2010. Durante su presidencia introdujo programas sociales con el objetivo de combatir la pobreza. Lula dejó una marca substancial en la política brasileña, conocido por sus contribuciones al crecimiento económico de Brasil. A pesar de su popularidad, fue condenado por cargos de lavado de dinero y corrupción en un juicio muy controversial. Ahora, Lula ha sido liberado de la cárcel, y sus derechos políticos han sido restaurados.    

Durante la pandemia, el presidente Bolsonaro siguió un estilo de liderazgo–más bien una falta de liderazgo– similar al presidente Trump de EEUU. Los dos presidentes continuamente negaron la crisis mientras la cuestión siguió empeorando. Ahora, siguiendo las elecciones presidenciales de 2020 de los EEUU, Bolsonaro está siguiendo a Trump de nuevo. En este caso, se refiere a las acusaciones falsas que hizo Trump acerca de una “elección fraudulenta”. Casi un año antes de las elecciones brasileñas, Bolsonaro ya está diciendo que si él no gana, no aceptará los resultados. “Tengo tres alternativas para mi futuro: ser arrestado, asesinado o victoria,” añadió en declaraciones a una reunión de líderes evangélicos que se transmitieron en las redes sociales. Estas exclamaciones tienen a algunos preocupados porque piensan que Bolsonaro no aceptará los resultados de las elecciones a menos que gane.

Las elecciones estadounidenses han tenido un gran efecto en las democracias de otras naciones, por ejemplo en Myanmar, donde vimos un colapso de democracia completa. El ejército tomó control del gobierno inmediatamente en un golpe de estado y arrestó al ganador presidencial legítimo. El golpe de estado en Myanmar ocurrió como parte de un gran efecto secundario que tuvieron las acusaciones de Trump acerca del fraude electoral. Una situación similar a la que pasó en Myanmar podría pasar en Brasil siguiendo las elecciones. Hace dos décadas, Bolsonaro dijo en una entrevista que si fuera presidente, haría un coup inmediatamente. Los peligros de un colapso de la democracia se están mostrando, y las acciones de Trump crearon una gran amenaza a la democracia. Es probable que Brasil vea un destino similar al de Myanmar. 

La anticipación para las siguientes elecciones está creciendo rápidamente, y las posibilidades de un resultado negativo parecen cada vez más claras. Bolsonaro ha aclarado que esta carrera no acabará en paz. •