Reseña del álbum “Oracolo” pro Skinshape

Nina Francos, Contribudora

“Oracolo”, italiano para “oráculo”, se lanzó en 2016 y es uno de seis álbumes del artista Skinshape, también conocido como Will Dorey, un compositor inglés nacido en Swanage, Dorset en 1991. Él arrancó haciendo música bajo este nombre luego de ser el bajista de un par de bandas. 

Dio varios sets como DJ en Londres, donde está basado, y empezó a trabajar en lo que eventualmente sería el primer álbum de Skinshape en 2013. “Oracolo” es su segundo álbum, siguiendo su moda en respecto al género de su música: rock psicodélico, funk, y soul. 

La transición dentro de sus canciones, de ritmo y a veces de género, produce una sensación increíble que transforma la percepción de este estilo de composición. Esto se debe tambien al uso de instrumentos cálidos y “vintage” por Skinshape, como el órgano, la guitarra y efectos de eco y reverb. 

La primera canción “Mandala” da una idea de lo que se trata el resto del álbum, una composición de ensueño, calma con una variedad de tonos increíbles. Es la mejor manera de arrancar el ritual de encontrar un nuevo álbum, es una canción que engancha y te da la oportunidad de imaginarte de qué se puede tratar el resto. La siguiente es “Oracolo”, el comienzo de Dorsey en añadir sus propios coros y armonizar la canción. La tendencia del artista de mantener una percepción calma, pero con un ritmo atrapante es una combinación fuera de serie. 

Las canciones “Old Days” y “Detroit”, son un poco monotemáticas, pueden cansar, y quizás perder la atención del público. Pero la que sigue, “Left With a Gun”, se expande un poco más allá de su tendencia, creando una sensación de conflictos internos, como puede ser inferido por el nombre, y temas más oscuros en general. Luego viene, “Rubber Gloves”. Esta composición es excelente, el principio arranca bastante similar a lo que venía ocurriendo en el álbum. Pero, alrededor de la mitad de la canción el ritmo se vuelve un poco más tranquilo. Más cerca del final, Skinshape agrega un solo de guitarra que considero un poema. Escuchar esta canción con auriculares o un parlante con volumen a fondo es la única manera de disfrutarla. 

El álbum termina con “Summer” y “The Man Behind the Mirror”, las dos siendo bastante diferentes a las primeras canciones. Los lyrics y la música en general no comunican una sensación de resolución, pero le dan una gran terminación a este momento tan maravilloso.